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Sagunto, un viaje de 2000 años


Tras mucho tiempo deseando realizar una visita cultural a Sagunto, pudimos realizar un viaje de 2000 años en el tiempo gracias a un amigo del Club32, historiador y docente, Raul, que preparó una exquisita exposición de la visita.
 
 
La visita estaba prevista realizarla trasladándonos en tren de cercanías desde Vila-real a Sagunto. Y durante el viaje, los niños tuvieron su primera sorpresa, porque otro amigo del Club32, Vicente, coordinó para que los niños pudieran entrar en la cabina del conductor del tren, lo cual les hizo mucha ilusión.



Una vez llegamos a Sagunto, nos dejamos llevar por nuestro guía Raul, que nos llevó en primer lugar al Castillo de Sagunto.
 
 
Con sus explicaciones los niños conocieron el motivo de su emplazamiento en lo alto del cerro, donde las vistas son magníficas tanto de la plana de Castellón como de la plana de Valencia, lo que suponía una posición estratégica desde su origen como  poblado íbero.
 
 
Nos deleitó con la explicación detallada de la Plaza de Armas, a la que se accede por la actual puerta de entrada al recinto. En esta plaza se conservan los restos más importantes de las construcciones del Foro Romano de época imperial. Una idea de la monumentalidad de los edificios que formaban el conjunto urbanístico del foro nos la da las grandes dimensiones de las bases de columna que pueden apreciarse en esta área.



Aunque el recinto en la actualidad es una amalgama de reparaciones y añadidos debido a las diferentes funciones que ha tenido a lo largo del tiempo, de la época ibérica como lugar de residencia, en época romana como espacio institucional, y desde época islámica hasta la Guerra Civil española, como plaza militar, espacio fortificado y lugar de defensa y control del territorio.
 
 
Desde el Castillo también pudimos observar el crecimiento natural de la ciudad desde las laderas del cerro hasta el cauce del Río Palancia , y el crecimiento desmedido debido al lucrativo desarrollo del suelo que ha dejado miles de m2 urbanizados sin ocupar.




A continuación visitamos el Teatro Romano, donde nuestro guía nos explicó que fue edificado en el año 50 d.C. , con forma de hemiciclo con un aforo de 8.000 personas aprox, con más de 90 metros de diámetro y que está  excavado en la roca de la ladera donde se encuentra ubicado. La conformación del teatro de Sagunto es la clásica, esto es, dividida en scaenae, cávea y orchestra, y tiene una estupenda acústica. Hecho que pudimos comprobar porque dos voluntarios hicieron una pequeña representación de la introducción de un acto teatral romano, donde los actores actuaban con túnicas y con máscaras según los personajes correspondientes. Nuestros voluntarios hicieron lo que pudieron, pero fue una segunda sorpresa y todos quedamos satisfechos.

 
 
 


Inicialmente teníamos también visita concertada en los espacios arqueológicos "Via del Pòrtic" y "Casa dels Peixos” pero una avería de última hora nos impidió conocerlos, aunque tras la decepción pensamos que nos sirve de excusa para volver.
Así que tras el recorrido a través del tiempo tan bien desarrollado por nuestro instruido guía Raul, lo único que nos quedaba era buscar sitio para comer.

Después regresamos de nuevo a casa en tren.

Un día especial.
 

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