Páginas

Pastores por un día

Cuando nuestro grupo visita nuevos entornos nos gusta caminar y descubrir nuevas rutas de senderismo, pero también nos gusta conocer su historia, su modo de vivir, etc. Así que cuando planeamos visitar Villafranca del Cid nos pareció muy interesante acompañar a un pastor, de los de verdad, en su tarea diaria con el rebaño de ovejas.




El pastor se llama Juli, y vive de la venta de carne de sus ovejas, y claro, de su otra profesión, porque es veterinario, no podía ser todo tan idílico.

Juli es una persona encantadora que nos introduce en el mundo del cuidado del rebaño, de su manejo y traslado a través de las veredas, de su alimentación, de sus enfermedades, todo ello mediante un paseo junto al propio rebaño de ovejas.






Mayores y pequeños estamos encantados con esta experiencia.




Y el hecho de que una de las ovejas se dejara tocar causó sensación entre los pequeños.




El paseo discurre entre veredas delimitadas por muros construidos en piedra seca, que nos llevan a distintos campos también delimitados por muretes de piedra donde pasturan los rebaños.




Por el camino encontramos fósiles entre dichos muretes.




Y también encontramos pequeñas construcciones donde se protegían los pastores antaño del frio y de la nieve.




El paseo con el rebaño es posible gracias a los protagonistas de esta actividad, que son los “gossos de rabera”, es decir, los perros adiestrados que controlan y dirigen al rebaño, y que sin su trabajo sería imposible manejar a las ovejas.

Así que el paseo terminó con una exhibición de los perros realizando su labor de trasladar el rebaño y de meterlo en un cercado, y como no del impresionante trabajo de adiestramiento de Juli, el que con sus órdenes indicaba a sus perros Xispa y Pancho como actuar para triunfar en el manejo del rebaño.








Sus perros participan y son ganadores en los Concursos de Gossos de Rabera que se celebran todos los años en Ares del Maestre, y en otros concursos de Cataluña.


La verdad es que esta actividad es todo un espectáculo y una experiencia inolvidable, y que recomendamos encarecidamente.




Taller de arcilla

Tras el éxito de la temporada anterior con este taller, hemos tenido que volver a repetir el Taller de arcilla este año, de nuevo con cartel de completo. Como siempre, se celebró en el Espai Jove de Vila-real.

Y es que a los niños les encanta experimentar con materiales, y en particular modelar y elaborar sus propias figuras con arcilla.

Los monitores Marta y Javier les mostraron a los niños la técnica de los churros, donde a partir de gusanitos de arcilla se pueden conseguir las bases y las paredes de los envases.






Luego con paciencia y uniendo bien los churros o gusanitos, y modelando, se obtienen piezas como las que mostramos.










Estas piezas necesitarían una cocción posterior para garantizar su durabilidad en el tiempo, pero si se secan al aire y se tratan con cuidado también duran.

Los chavales unos artistazos, y los papis y mamis colaboradores también ;-).






Viaje a Colonia con niños



Viajar con niños es complicado porque el viaje ha de estar adaptado a ellos para que sea un éxito. No importa el destino, sino el contenido del viaje.

Nosotros aprovechamos las últimas vacaciones de Navidad para visitar Colonia en Alemania. Os preguntaréis cual fue el motivo de visitar Colonia. Pues queríamos ir a Alemania para practicar el idioma alemán que estamos aprendiendo, y buscando distintos destinos, encontramos que Colonia:
  •  Tiene una fantástica comunicación aérea con Valencia mediante compañía aérea de bajo coste.
  • El aeropuerto está a 10 minutos en tranvía de la ciudad
  • El casco histórico está justo al lado de la Estación Central de Ferrocarril

Por todo ello Colonia es una ciudad perfecta para aprovechar el tiempo dela estancia al máximo. Además como el transporte ferroviario en Alemania es muy eficiente, desde su Estación Central se puede acceder cómodamente a otras ciudades próximas.

La época navideña, a pesar del frio al que no estamos acostumbrados, es ideal para viajar a los países europeos por la bonita ambientación y decoración navideña.

Lo primero que encontramos en Colonia justo al lado de donde nos alojábamos en la Plaza Heumarkt fue un típico mercadillo navideño con pista de hielo, perfecta para los niños y los patinadores adiestrados.








Nosotros nos dedicamos a entrar en calor.




Os aconsejamos aquí las visitas imprescindibles si visitáis Colonia:

-          Visitar la impresionante Köelner Dom, que es la mayor Catedral de Alemania y la catedral gótica de mayores dimensiones del mundo, donde se guarda el supuesto sepulcro de los Reyes Magos, y que verdaderamente impone por sus enormes dimensiones.






-          Conocer el Puente de Hohenzollern sobre el Rhin, el puente más antiguo construido entre 1907 y 1911, y sirve de acceso a la ciudad. También conocido como Puente del Amor, donde los enamorados perpetúan su promesa de amor mediante candados. Es impresionante ver miles de candados de diferentes formas y colores.





  
-          Pasear por el AlterZenter con bonitas estampas en cualquier rincón.




-          Visitar el museo que tú quieras. Colonia es la ciudad de los Museos. Nosotros os recomendamos para ir con niños:



 






-          Hacer la Ruta de los Belenes por las distintas Iglesias Católicas de la ciudad.



 
-          Coger un tren a una ciudad cercana: Düsseldorf, Bohn, etc. Se puede comprar distintos tipos de tarjetas de viaje que economiza el precio del billete, nosotros elegimos una tarjeta familiar de un día y conocimos Düsseldorf.










Y el resto de actividades recomendadas, son las habituales en cualquier ciudad: recorrer la zona comercial, probar los platos típicos, en este caso los variados Bradwuster y sus salsas, pasear por sus parques, etc. En particular recomendamos el Parque Rheinpark, que en verano es recorrido por un trenecito.

Si vais en Navidad, os recomendamos visitar alguno de los mercadillos navideños. Y si vais en Noche Vieja, se celebra junto al Rhin una espectacular fiesta en la calle, donde lo tradicional es que todo el mundo tire fuegos artificiales, y donde la entrada del nuevo año se celebra con un inmenso espectáculo de color en el cielo nocturno.

Y ya no tuvimos tiempo para mucho más, y es que ¡el tiempo en vacaciones pasa volando!.


Bosque de La Parreta

Una ruta imprescindible si visitáis Villafranca del Cid en familia es el Bosque de La Parreta.

Esta ruta forma parte del conjunto de itinerarios de la Piedra en seco que propone el Museo de la Piedra en Seco de Villafranca del Cid, y consiste en un recorrido circular de unos 4 km apto para todos los públicos.

Su punto de partida es la pista situada tras el Albergue La Parreta , y aunque no está señalizado como sendero local, nos encontramos murales explicativos del recorrido que impide cualquier extravío.

Recorremos un frondoso bosque de carrascas y poco a poco vamos tomando altura.








El trayecto resulta muy interesante por la belleza del entorno, por las explicaciones ilustrativas de los paneles y además porque podemos encontrar fósiles a montones. Los fósiles que encontramos son de conchas marinas, también conocidas como orejas de moro.






Durante la bajada podemos obtener hermosas vistas del valle de La Parreta y de Villafranca.




Se trata de una ruta corta y a la vez muy interesante, que la recomendamos para realizar en familia, y e ideal para hacerla como complemento de la visita al Museo de la Piedra en Seco.


Os dejamos aquí el TRACK.


Un día en Actio en familia



Os dejamos aquí una propuesta ideal para pasar un día en la naturaleza con amigos o con la familia: pasar un día en el Albergue Actio en Alborache.

Por supuesto ofrecen mucho más, pero nosotros os contamos nuestra experiencia. Nosotros fuimos en grupo y los niños realizaron distintas actividades por la mañana, y ya después todos juntos, adultos y pequeños, hicimos un paseo de iniciación al senderismo por la tarde.

Pero si un domingo no tienes ningún plan, puedes ir con tu familia y apuntarte a la actividad programada para dicho día, y pasar un día divertido sin necesidad de preparar nada porque en Actio ya lo tienen todo pensado y dispuesto.

Las instalaciones cubiertas están muy bien, pero lo más importante son sus espacios exteriores: una pequeña granja con cabras, ovejas, gallinas y un conejito, un huerto, reconstrucciones de pozo de agua y de horno de leña, distintos ambientes, zona de juegos, tirolina, puente tibetano y varios senderos con indicaciones de posibles rutas de senderismo con punto de partida el mismo albergue.









Nuestros niños más mayores ocuparon la mañana lanzándose por la tirolina y superando el puente tibetano, y los más pequeños se convirtieron en granjeros disfrutando de actividades más sencillas como un taller de semillas, todos ellos acompañados por monitores. Mientras tanto los adultos paseamos por el entorno.






La comida consistió en una ensalada, un buen plato de paella y postre, que nos sirvió para recuperar fuerzas para disfrutar de una tarde de senderismo por la Ruta de los Molinos de Alborache.

Este sendero tiene una longitud de unos 1700 metros discurriendo en paralelo al Río Buñol, donde podemos encontrar distintos molinos que aprovechaban la fuerza motriz del agua, y que alcanzaron notoriedad a mediados del siglo XIX con el desarrollo de la industria papelera.

Nosotros sólo hicimos un tramo del sendero. Durante el paseo nos acompañó una monitora que iba dando las explicaciones correspondientes. Nos mostró el Molino Galán que fue construido en 1850 como molino harinero y que actualmente es una Masia Rural. Pasamos por delante de las ruinas del Molino de Guarro y llegamos a un Área recreativa dotada con mesas, bancos y papeleras que es ideal para pasar un día de pic-nic con los niños.






Luego seguimos hasta el azud del Molino de la Luz, construido para desviar parte del agua del río hacia la acequia que movía las turbinas de dicho  molino.




En este punto dimos la vuelta y al regreso nos acercamos al Charco Azul, que es una charca donde brota un manantial, siendo éste un paraje tradicional para los lugareños.




Tras el paseo ya tuvimos que tomar el bus para regresar a casa.

En definitiva, pasamos un día estupendo, y recomendamos la experiencia en particular a familias con hijos pequeños porque pueden encontrar en Actio un espacio cómodo y seguro para introducir a los niños en la naturaleza.