Una de las
citas que teníamos pendientes y que por fin este año hemos conseguido realizar
era la visita al Museo Minero de Escucha
(Teruel).
Nos lo
habían recomendado y realmente merece la pena, tanto para mayores como para los
niños.
La visita
empieza con el equipamiento con casco dotado de linterna y cápsula con filtro
para poder respirar una hora en caso de accidente en el interior de la mina.
Pero no hay riesgo alguno, no os asustéis, aunque se han de cumplir las normas
de seguridad.
El paso
siguiente es montase en una góndola que en minutos nos baja con un desnivel del
33% a 100 metros por debajo de la tierra. Ya una vez en este punto, la visita
es a pie por el interior de la mina donde nos explican las pesadas condiciones
de trabajo, cómo se extraía el carbón, las distintas galerías de trabajo y de
ventilación, etc.
Como
curiosidad se visita un tajo natural de carbón, el único que existe en España
visitable en un Museo.
La visita
se hace corta, aunque siempre queda comprarse un recuerdo en la tienda de
minerales.
Nosotros
aprovechamos nuestro fin de semana de Festival
Tamborilé para visitar el Museo Minero, pero también se puede combinar
con un recorrido por Galve que es un
Parque
Paleontológico o por Aliaga que
es un Parque
Geológico. La verdad es que esta zona queda muy cerca y tiene muchas
posibilidades para realizar distintas actividades con niños.