El domingo pasado fuimos a pasar un día en la nieve,
nosotros y mil millones de personas más. Por lo visto, la escasez de nieve y la
ola de frío hizo que todos retrasáramos nuestra excursión hasta la misma fecha,
porque realmente éramos muchísima gente.
La idea era pasar el día en la Estación de esquí deValdelinares pero fuera de pistas, porque todavía no hemos aprendido a esquiar,
y disfrutar de sus instalaciones. Ante la masiva afluencia de gente, después de
los juegos marchamos a comer a un sitio más tranquilo.
Pero la mañana fue estupenda, al final salió el sol, y los
niños se lo pasaron genial tirándose con trineo esquivando las miles de
personas, haciendo muñecos con la poca nieve existente, y en fin estando todos
juntos.
Por la tarde estuvimos en Mora de Rubielos, un pueblo con
encanto por el que se pasa para llegar a Valdelinares, y que merece una visita
con un poco más de sosiego.
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